CARACTERÍSTICAS LITERARIAS DEL CORÁN 2
CARACTERÍSTICAS LITERARIAS DEL CORÁN 2
CARACTERÍSTICAS LITERARIAS DEL CORÁN 2
Las aleyas hacen ciertas demandas. Ahora, ¿cuáles son las demandas? ¿Existen en lenguaje claro?
“Qur’anan ‘arabiyan li-qaumun yaghlamuun”
Un Corán árabe para una nación que busca conocer. ¿Quieres saber lo que queremos? ¿Sabes lo que quiere Dios, quieres saber qué, cuáles son las demandas? Aquí están. Ya vienen. Entonces Allah, ‘azza wajal, revela la aleya: «basheeran wa nadheera».
Este Corán vino. Sus dos funciones principales: «Bashir». ¿Saben lo que eso significa? Algo que da una buena noticia. Viene con una buena noticia para ustedes. Tiene una buena propuesta para ustedes.
“Wa nadheerah” – una advertencia, una amenaza – “wa nadheerah”.
“Fa a’rada aktharuhum fa hum lya yasma’uun” – pero la mayoría lo ignora a propósito.
«I’raad» es ignorar algo a propósito.
Ni siquiera escuchan; y ellos son los que en realidad no están escuchando. Ellos piensan que no estás escuchándoles. Pero el verdadero tonto, el real, ya sabes, las personas incapaces de oír son esa gente de allá (se refiere a los que llamaron a Utba para discutir con Muhammad). Ellos son los que no están escuchando.
«Fa lya hum yasma’uun» Allah está respondiendo a su negociación con una aleya del Corán. Y mientras las aleyas están siendo reveladas, las personas están viendo desde la distancia, ¿no? Ellos no escuchan lo que está pasando, pero ven lo que está pasando. Ellos ven que la cara de Utba cambió. Ellos ven que su rostro cambió. Entonces ¿qué notaron? Que está llorando. Utba comenzó a llorar – su experto negociador, kafir, enemigo del Islam, insultador del Mensajero salAllahu ‘alaihi wa-s-salam. Lyaghanuhu Llah!
Él escucha el Corán y empieza a llorar. Él lloraba mientras las aleyas seguían; y se hacían más fuertes y más fuertes en su formulación, que trato de tapar la boca del Mensajero salAllahu ‘alaihi wa-s-salam. «Para, por favor, no puedo aguantar más». El Mensajero salAllahu ‘alaihi wa-s-salam siguió recitando, hasta que llegó a la aleya de sajdah. Hizo sajdah (se postro, sajdah en árabe significa postración). Y volvió.
Utba volvió de este «debate», este experto negociador de los Quraysh en quien sus esperanzas estaban poniendo, él vuelve; y le dicen: «Tu rostro no luce igual que cuando te fuiste. Esta no es la cara con la que has ido». Y él dice: Lo que sea que este hombre tiene que decir se convertirá en un evento enorme. Lo que este hombre tiene que decir se convertirá en un acontecimiento enorme”.
Ahora, esto es importante. Debido a que las aleyas del Corán – el aleyas que el Mensajero estaba recitando, no tenemos tiempo para entrar en todas ellas, pero por lo menos iremos a la última, – «fa in a’radu» esto es hacia el final del pasaje, «fa in a’radu» – y si continúan ignorando deliberadamente, si lo han hecho. «Fa qul» – entonces diles. Ahora, ¿quién eres tú? Muhammad, salAllahu ‘alaihi wa-s-salam. Por las palabras, Utba se da cuenta que no está hablando con Muhammad, sino con Allah, quien no está dignificando a Utba. Allah está diciendo al Mensajero, salAllahu ‘alaihi wa-s-salam, para decirle a Utba. Allah no le está hablando directamente. Allah podría haber dicho «andhartukum» – Te lo advierto, sino que Él dijo «fa Qul andhartukum» – Dile que yo les advierto a todos ustedes. A todos ustedes, ¿de qué? «Saa’iqatan» – una poderosa explosión. «Mithla saa’iqati ‘Zamud wa aadin» – al igual que la explosión que se produjo ¿con quiénes? ‘Ad y Zamud. Esto es algo que los árabes conocían. Ellos sabían que esto había sucedido en el pasado. Y ahora Utba sentado allí, sólo se dio cuenta de que se ha emitido una amenaza directa del propio Allah, de las palabras del Mensajero que se han dado a él por el mismo Dios. Él vuelve y dice: «Lo que sea este hombre tiene que decir, les sugiero que lo tomen en serio o que ‘sayakuuna naba-an ‘aDHeema’»- dice, “pronto va a convertirse en un gran evento”. Ellos le dicen: «Sahhara» – hizo magia en ti también. “Lanzó sus hechizos sobre ti también”. Él dijo: «Digan lo que digan no es magia. Pero no voy a hablar con él nunca más». Se dio por vencido con el Mensajero salAllahu ‘alaihi wa-s-salam.
Compartí esto con ustedes por una razón – para ilustrar una tragedia. Y la tragedia es que los incrédulos de la época del Profeta, salAllahu ‘alaihi wa-s-salam, y los creyentes comparten una cosa. Ambos fueron dominados, ¿por qué cosa? Por el Corán. Ambos fueron dominados por el Corán. Pero los creyentes, por el contrario, los creyentes de nuestro tiempo por no hablar de los incrédulos, incluso los creyentes no se dan cuenta del poder del Corán. No están atónitos, hipnotizados, abrumados por las palabras de Allah, incluso en comparación con la forma en que los incrédulos solían ser hipnotizados por aquel entonces. Y eso es una tragedia. Eso es una verdadera tragedia. Ese efecto del Corán es algo que se pierde. Y se perdió hasta el punto que la gente puede hacer preguntas absurdas sobre el Corán. Decir cosas sobre el Corán – «¿Cómo es que dice esto? ¿Cómo es que se dice aquello?». Quiero darles una representación visual antes de empezar a dar ejemplos in sha’ Allah.
Verán, si ustedes y yo hubiésemos tenido la suerte de vivir en la época de Musa (Moises), ‘alayhi-s-salam. Y nos encontráramos junto a él cuando Allah le ordenó golpear la vara, y el agua comenzara a separarse. ¿Alguna vez cuestionarían a Musa, ‘alayhi salam? ¿Alguna vez dudarían? ¿Alguna vez tendrían alguna vacilación en su fe? No lo creo. Eso es un deber muy pesado experimentado de pasar – ver que eso pase, escapar de las mismas garras de la muerte por la intervención milagrosa de Dios. Nuestra creencia, como musulmanes, como creyentes en el mensaje de Muhammad, salAllahu ‘alaihi wa-s-salam, es que Allah le dio el milagro final, el más duradero, y el más poderoso de todos. ¿Cuál es? El Corán. Como resultado, si fuéramos a apreciar este Corán como un milagro en estos momentos. La mayoría de nosotros, lo apreciamos como un texto religioso, como un libro de guía, como un libro de conocimiento. Agradecemos esas cosas. Pero si hemos añadido a nuestra apreciación, su sabor como un milagro de Dios, como profundas palabras que se supone que cambien la vida solo por su impacto, entonces tendríamos una sensación totalmente diferente de la fe. La fe antes de esto y la fe después de esto son dos cosas diferentes. Cuando los compañeros del Profeta oían el Corán oían dos cosas al mismo tiempo. Oían un recordatorio, un asesoramiento, una orientación – todo eso. Al mismo tiempo, también experimentaron un milagro de Dios. Cuando escuchamos el Corán hoy, ¿qué oímos? Oímos el recordatorio. ¿Qué falta? El milagro – el otro lado.
Quiero que imaginen que viven, no sé, hace miles de años en alguna sociedad. Y cuando ustedes vivían en esa sociedad tenían un vecino. Y su vecino llamó a su puerta un día. Y él les dice: «Ahm… un ángel vino a mi casa. Él me dijo que yo soy el mensajero de Dios. Y se supone que debo entregar este mensaje a toda la humanidad. Ya lo he entregado a mi familia y me ha rechazado. Y ya que eres mi vecino, el derecho de los vecinos es, que te lo diga. Y, por cierto, soy un mensajero de Dios. Y todo lo que digo no son en realidad mis propias palabras. Son palabras de Dios – de lo Divino. Digamos que de Allah subhanahu wa ta’ala – son las palabras de Allah. Y seguirme en realidad no quiere decir que me estás siguiendo. Significa que estás obedeciendo a Allah».
Hay dos problemas con este comunicado. El vecino que abre la puerta y escucha todo esto dice: «Espera, así que lo primero de todo lo que me estás pidiendo, es ¿creer que un ángel habló contigo? ¿Que Dios te habla? Mi vecino, te he conocido por 20 años y esto es bastante difícil de creer, pero por encima de eso ¿quieres que cambie todo sobre mi vida en base a cada palabra que dices? Hay dos cosas que son muy difíciles de hacer. Una es creer esto, sobre todo cuando tu propia familia dice que estás loco. Tu propia familia dice que estás loco y quieres que te crea, y yo no solo debo creer lo que estás diciendo sino que debo seguirte en todo lo que haces. Y cuanto más te siga no solo la gente te llamara loco, ¿sino a quién más van a llamar loco? A mí. Eeh, voy a pensar en ello, gracias». Cierra la puerta.
Y les doy esto a ustedes porque los mensajeros del Islam, los mensajeros de Allah, que fueron enviados a diferentes naciones, saben que dieron da’wa (invitaron al Islam) a su gente, pero no es como nuestra da’wa. Nosotros la tenemos fácil – somos millones. Cuando uno es el único que cree algo en toda la ciudad, ¿ya sabes lo que eres? Que estás loco. ¿Qué hizo la gente, cómo llamaba a los mensajeros? ¿Alguna vez han leído? ¿Cómo los llamaban? ¡Locos! Los llamaban locos. Ustedes dicen que todas esas personas malvadas les llamaban locos. ¿Cómo pudieron hacer eso? Pónganse en sus zapatos. ¿Es fácil de aceptar si no hay nadie a tu alrededor que crea? Si no hay nadie a tu alrededor, todo el mundo que te rodea es escéptico. Nadie cree. Esto es una cosa muy muy difícil de creer. No es fácil. Los compañeros del Profeta son lo mejor de la gente, la mejor generación, por una razón. Su fe era el puente más difícil de cruzar. Cuando alguien declara la shahada (abraza el Islam) hoy, es más fácil que el puente que tuvieron que cruzar – que era mucho mucho más difícil. Y el más difícil, el más duro de todos es el trabajo del mismo Mensajero salAllahu ‘alaihi wa-s-salam. Porque, ya saben, Dios escogió a las personas más inteligentes sobre la faz de esta Tierra para ser Sus mensajeros. Son las personas más inteligentes y que son lo suficientemente inteligentes como para saber que cuando van en torno a golpear puertas y decirle a la gente que ellos reciben la revelación de Dios ¿qué deben anticipar prácticamente? Ellos deben prever que la gente va a decir que son locos. Van a perder su credibilidad. La gente va a reírse de ellos, incluso les va a hacer daño, incluso se molestarán con ellos. Perderán el contacto con sus familias. Eso es todo lo que va a pasar. Una persona inteligente puede descubrirlo por sí mismo. Ellos sabían que esto va en este mensaje, pero no tenían opción, ya que no tomaron esto como un pasatiempo. Esto fue dado a ellos como una responsabilidad. No tenían ninguna opción en la materia. Es una posición imposible para estos Mensajeros, ‘alayhimu salyatu wa-s-salam. Y para ayudarlos y solo para ayudarles a ofrecer este mensaje, Allah les daría a estos mensajeros algo que haría su reclamo más creíble. ¿Qué era esa cosa? Los milagros. Allah daría a Sus Mensajeros milagros. Así que los escépticos estarían bastante silenciados. Así que la razón para no creer en él, no es que no vi ninguna prueba, la razón es que soy demasiado arrogante como para seguirlo. Esa es la única razón que queda. La razón no es ya intelectual, esa es la única razón que queda, la arrogancia. ¿Y cómo se elimina la primera razón – el problema intelectual? Ustedes la eliminan dando a la gente algo que solo puede ser de Dios. No puede ser de un ser humano. No puede ser el producto de la mente humana. No puede ser de la creación. Tiene que haber algo más allá. No puede ser algo que solo puede ocurrir de forma natural, ya ven. Es eso que leemos acerca de los milagros de diferentes profetas: la persona ciega es capaz de ver una vez más, a los muertos se los vuelve a la vida; el pájaro de arcilla se convierte en un pájaro vivo – todas estas cosas son señales claras de que este hombre no está hablando en su propio nombre, él está hablando en nombre de Allah, ‘azza wajal. Pero Dios le dio a esta nación el último milagro de todos. Él dio a esta nación, a esta ummah musulmana, y para el resto de la humanidad, Él les dio el Corán.
La diferencia acérrima entre el Corán y todos los otros milagros ¿es qué? Todos los otros milagros eran para los ojos, para ver. Se podía ver a ese tipo que vuelve a la vida – se podía ver. Se podía ver que se dividían las aguas – se podía ver eso. Pero el Corán no es para los ojos. ¿El Corán fue para qué? Notas algo, – que penetra tu corazón. Con el Corán: «ajaba innaa sami’na Qur’anan ‘, fastami’uu lahu, sami’naa wa ata’naa.» ¿Qué está diciendo Dios? ¡Escucha, escúchalo! «Yaa ayuhannas Duriba mathalyan fastami’u lahu» – escucha cuidadosamente, escucha a este Corán, que es un milagro para los oídos. Es diferente. ¿Todos los otros milagros eran para qué? Los ojos.
Cuando yo estaba explicando esto a mi clase de quinto grado, un día uno de mis estudiantes dijo: «Oh, hombre…”, le dije: «¿Qué pasó?», él dice: «No es justo», “¿Qué no es justo?», él dice: «Todos estos otros profetas consiguieron un material tan genial. ¡Nosotros solo recibimos un libro!». Sé que parece una blasfemia, pero él tiene su punto. Es diferente. Nosotros afirmamos que un libro almacenado en la biblioteca de la mezquita es un milagro de Dios, el milagro del Islam. La prueba del Islam se asienta en cada estantería, este mushaf (el libro del Corán). Así que tiene que haber alguna base que debe ser explorada. ¿En qué nos basamos para hacer esta afirmación? ¿Y por qué Allah subhana hu wa ta’ala cambió la dirección de los milagros? Él no lo hizo algo para ver con los ojos. Cuando la gente vio la divisoria de aguas le decían a sus hijos al respecto: «¡Lo vi con mis propios ojos!» Los niños estaban escuchando. Luego sus hijos dijeron a sus hijos, y sus hijos dijeron a sus hijos hasta que pasó a nosotros; y le decimos a nuestros hijos en la escuela: «Hey, por cierto Musa, alayhi salam, ¿qué hizo?» «Aah paso por el agua, sí, algo de agua.» Es sólo una historia ahora. ¿Para las personas que estaban allí era sólo una historia? No, era un milagro. Pero para la gente después de ellos es solo una cuestión de fe. No es un milagro para ellos, sino que es una cuestión de fe, no un milagro. Debido a que un milagro es algo que se podía ver, algo que podría experimentar y algo que se puede degustar.
Así que ahora viene el ateo, el incrédulo, viene al cristiano o el judío y dice: «Usted cree que Jesús volvió a la vida, ya sabes, al chico muerto, ¿cómo usted cree eso??». Él dice: «Sí», él dice: «¿Por qué?», «Porque la Biblia lo dice», «¿Estabas allí cuando sucedió? ¿Alguien lo grabó? ¿Está en YouTube? ¿Por qué lo crees?», ¿Qué dice el cristiano?, «Está en mi corazón». Es todo lo que tiene para decir. El mismo ateo, el mismo kafir, el mismo incrédulo se va al musulmán: «¿Usted cree que el Corán es la palabra de Dios?», «Sí», «Oh, sí, ¿viste al ángel descender?», «no, no lo vi «, «Entonces, ¿cómo sabes que esa es la palabra de Dios?», «Bueno, vamos, ven a estudiar el Corán, deja que te enseñe. Déjame mostrarte. Déjame mostrarte por qué esto no puede ser de un ser humano». Esa parte siguiente cuando digo «déjame mostrarte» eso es lo que necesitamos saber. Necesitamos esa parte para nosotros mismos y para los demás. Realmente lo necesitamos para nosotros mismos porque no hay impulso en la fe como el impulso que se obtiene cuando ustedes experimentan un milagro de Dios. No hay nada como eso. Y necesitamos eso, para ser capaces de ilustrar a los demás porque entonces, la cuestión los perseguirá a ellos – no van a dormir por la noche pensando: «Hombre, no he tenido una respuesta para ese tipo. ¡Tengo que mirar esto!»
Tengo un amigo que era un ateo, que llamaba a los programas religiosos en todo el país solo para meterse con los oradores. Y él les hacía preguntas, hacía preguntas hasta que se topó con un sheikh y él le dio un milagro del Corán. Y él dice: «Ah, sí, bueno, voy a hacer mi investigación.» Y él hizo su investigación, y él hizo su investigación, y él hizo su investigación. Y no podía encontrar nada hasta que tuvo que renunciar, literalmente, se dio por vencido, y él declaró la shahada (abrazo el Islam). Y dice cuando digo «Yo soy musulmán», saben lo que significa ser musulmán, ¿no? – El que se somete. Dijo “yo me sometí literalmente”. Tuvo que rendirse, no podía luchar más. No tenía a donde ir, subhan Allah! Eso es lo que tenemos que revivir, eso es algo que tenemos que apreciar.
Sólo les voy a dar un ejemplo, un ejemplo del Corán como un milagro profundo desde el punto de vista literario. Ahora, ustedes han tomado clases de literatura, ¿no? Ustedes han leído Shakespeare, han leído Platón, la Odisea, ¿no? Ustedes han leído todo esto. No voy a llamar a eso basura. Todo tiene algún beneficio. Han leído estas cosas. Estos son los puntos de referencia de la literatura mundial, los productos – los productos finales de la mente humana, ¿no? Nuestra creencia es que el Corán es lo máximo en cuanto a literatura en comparación con cualquier idioma. El Corán es literatura suprema. Pero eso es una cosa subjetiva. Si ustedes son estudiantes de literatura. La literatura no es objetiva. ¿Es qué? Es subjetiva. Así que ustedes me dicen que algo es hermoso, o me dicen que algo es feo, ¿no? Si te gusta ese poema o no te gusta ese poema. Si te gusta esta canción, o no te gusta esa canción. Yo no escucho canciones, nomás lo estoy diciendo. O te gusta esta pintura, o no te gusta esa pintura – es subjetivo. ¿Así que se podría argumentar que la literatura es qué? Es subjetiva. Pero empecé diciendo que Allah dice que el Corán es «balyaagh». Es un medio de comunicación. Y el propósito de la comunicación es influir en la audiencia. Así que vamos a juzgar que es la mejor literatura ¿por qué? ¿Cuál es la vara de medir? – ¿Qué influencia tiene? ¿Qué impacto tiene en el mundo? ¿Qué cambio causa esto? ¿Cómo cambia a la gente? ¿Cómo influye el comportamiento? ¿Cómo modifica el comportamiento de las personas? ¿Cómo manda sobre la gente? – eso será el juez. Ese es el juez práctico del poder de cualquier discurso, cualquier literatura. Se podría decir que es maravilloso, pero no lo practico, creo que es sólo ficción. O ustedes podrían decir que es maravilloso y que ha cambiado sus vidas – la manera en que viven. Y si ustedes estudian este hecho históricamente, ninguna sociedad pasó por una transformación basada en un texto único, en la manera en que los musulmanes pasaron con el Corán. Ninguna sociedad en la civilización humana – nunca. Y ¿en cuántos años la sociedad (los Quraish) se transformó? En 23 años. En esto los orientalistas incluso están de acuerdo. De acuerdo, el Qur’an está siendo reclamado como revelación. No voy a decir que es una revelación desde el punto de vista del incrédulo – sabemos que es de hecho una revelación. Él (Profeta Muhammad) dice que empezó (su ministerio y la revelación del Corán) a la edad de cuarenta años y que se detuvo ¿a qué edad? 63, 23 años en total. En 23 años, este hombre comienza sólo, sin ayuda de nadie, una persona sola. Y para el final de estos 23 años los cambios que provocaron estas palabras y este hombre, este orador, este discurso y este estilo de expresión ¿en qué han influenciado? La forma en que la gente come, ¿cambió? La forma en que la gente duerme – ¿cambió? Quizás la forma en la gente lidia con la familia, ¿cambió? La forma en la que la gente programa su día, ¿cambió? Las formas en las que las personas hablan el uno al otro, ¿cambió? La forma de hacer negocios, ¿cambió? La forma en que van al baño, ¿cambió? ¿La forma de vestir cambió? La cuestión no es lo que ha cambiado. ¿Saben cuál es la pregunta? ¿Qué no cambió? Todo cambió. Cada vez que se cita la «revolución en la sociedad» – es ya sea económica o política, ¿verdad? Hay un cambio político. Hay un cambio económico, hay un cambio militar, pero la forma en que las personas viven día a día no cambia. No cambia la forma en que tratan a sus familias en función del cambio de gobierno o un nuevo sistema que llega al poder. Eso sigue siendo lo mismo. Siguen siendo las mismas personas. Pero este cambio que trajo el Corán – es sin precedentes en la historia humana. Lo que cambió exactamente no era solo un cambio social, no solo estaba en el nivel macro sino que incluso cambió la forma de pensar. Cambió todo – todo – desde un nivel individual a un nivel colectivo, y cada espectro en el medio. Esto en sí mismo es una evidencia del poder incomparable del Corán, el poder sin igual del Corán. Es incomparable de esta manera…
In sha’ Allah tras el descanso voy a hablar con ustedes acerca de unos ejemplos del Corán, uno tras otro, de los diferentes aspectos del Corán como literatura.
Nos tomamos un descanso ahora. SubhanahuLlahu wa bihamdik nashhadu an laa ilaha illa anta nastaghfiruka wa natubu ilaik..
El Corán es una literatura increíble, desde muchos, muchos ángulos diferentes. Se podría estudiar este tema desde muchos puntos de vista diferentes. De hecho, estoy trabajando en un seminario que será lanzado en febrero dedicado a cada ángulo, cada perspectiva desde la cual podemos estudiar y apreciar la elocuencia y la precisión y la belleza del Corán.
Yo solo voy a presentar probablemente tres dimensiones a ustedes hoy, de la veintena que he recopilado hasta el momento. Por lo menos tres dimensiones voy a tratar de presentar a ustedes hoy in sha’ Allah. Y la primera de ellas es la precisión en la selección de palabras o la selección de palabras precisas. Cuando ustedes y yo hablamos, ponemos palabras juntas, pero no necesariamente damos demasiada importancia a todas y cada una de las palabras que decimos. El enfoque central cuando nos comunicamos no son las palabras, es la idea real. Cuando se sientan y escriben algo, ¿qué hacen? Ustedes escriben algo y dicen: «No, quiero editarlo. Quiero decirlo mejor». Y vuelven y cambian una o dos palabras o reorganizan el tema, ¿no? ¿Así que la escritura es mucho más cuidadosa que qué? Que hablar. El hablar es espontáneo. Es en el acto. No hay tiempo para editar las palabras. Simplemente sale. Pero la escritura está muy bien pensada porque hay un proceso editorial. Ahora, ya hemos dicho que el incrédulo dice que el Corán es la palabra de Muhammad mientras que el creyente sabe que es el discurso de Allah. El discurso de un ser humano no se calcula necesariamente cuando se habla, no es calculado cuando se habla Pero el discurso de Allah es perfecto, ya que viene de una fuente que es perfecta. Y que se ilustra con cientos de miles de ejemplos en el Corán. Este es un tema en sí mismo – la precisión de las palabras en el Corán. Es un tema en sí mismo. Les voy a dar algunos ejemplos muy breves.
Shuaaib, ‘alayhi salam, ustedes saben que es un Mensajero, ¿verdad? Ahora, como Mensajero, ‘alayhi salam, se le menciona varias veces en el Corán. Allah, ‘Azza wa jal, nos dice: «Wa ilyaa madyanaa akhaakhum Shuaayba» – a los madian les enviamos Shuaaib. Ahora lo que quiero decir es ¿cuál es el nombre de la nación a la que pertenecía? Madian. Ahora Madian es el nombre de dos cosas al mismo tiempo, tienen que recordar esto, ok?
La palabra Madian se refiere a dos cosas. Madian es el nombre de un lugar y es el nombre del pueblo. Las personas se llaman Madian y el lugar también se llama Madian. Y Allah dice “a Madian enviamos su hermano Shuaaib”. En sura Ash-Shu’araa, sura 26, Allah, azza ‘wa jal, nos da las historias de diferentes profetas. Él dice: «Idh qaala lahum akhuhum Lootun; idh qaala lahum akhuhum Saalihun; idh qaala lahum akhuhum Hoodun; idh qaala lahum akhuhum Noohun” – “cuando su hermano Noé les dijo”; cuando su hermano Noé dijo a su nación. La siguiente historia va a otro profeta. “Cuando su hermano Salih le dijo, a su propia nación”. Luego se dirige a Hud. “Cuando su hermano Hud les dijo”. Entonces, cuando su hermano Salih, Hood, Noé, ‘alayhim salam y Lot – los cuatro de ellos: su hermano, su hermano, su hermano. El quinto mencionado es Shuaaib. Allah dice: “cuando Shuaaib les dijo”. Él solo dice: «Idh qaala lahum Shuaaybun» – “cuando Shuaaib les dice”. Con todos los otros profetas en esa misma sura ¿qué dijo? “Su hermano Noé, su hermano Salih, su hermano Lot, su hermano Hood”. Pero cuando se trataba de Shuaaib dijo “Shuaaib” – ningún “hermano”. Lo que es realmente interesante es que en otros lugares en el Corán Allah dice: «Wa ilyaa Madiana», como dije, «Wa ilyaa Madyana akhaahum Shuaayba» – “a Madian, sobre todo, enviamos a su hermano Shuaaib”. En la sura en la que todo el mundo es declarado como hermano de su nación, se espera que cuando llegue el turno de Shuaaib ¿qué esperas ver? Que es su hermano. Pero la palabra «hermano» no está. Es el único que se ha sacado. Todo el mundo lo mantiene y lo que encontramos, que es muy interesante, está justo antes – recuerden que la nación para la que fue enviado ¿cuál era su nombre? Madian. Tienen otro nombre que es «aShaabu-l-Aika». Es un nombre más largo – «aShaabu-l-Aika» – significa el pueblo de al-Aika. Aika era un árbol gigante que solían adorar. El nombre de ese árbol era Aika. Así que se les conocía por el nombre religioso también. Su identidad religiosa era el pueblo de Aika. El hecho de que él nació en Madian; que pertenecía a la ciudad de Madian que su ministerio fue en Madian, ¿verdad? Uno de los árabes. Debido a que por la raza y por la región es su hermano. Así que Dios dice “a Madian enviamos su hermano Shuaaib”. Pero cuando Dios les menciona no como los madianitas, ¿sino como la gente de qué? Al-Aika – ese árbol. Allah les está hablando con su identidad religiosa. ¿Y cuando se trata de su religión es su hermano? No. Así que cuando Dios menciona su religión dice “cuando Shuaaib les dice” – ningún hermano. Al eliminar la palabra “hermano” de ese contexto, en particular, ¿qué se ha puesto de manifiesto? Lo que se ha puesto de manifiesto es que no hay hermandad cuando se trata de religión. Eso va más allá. Es muy profundo, preciso. Debido a lo que se nos dice, esperamos caso tras caso tras caso en sura Ash-Shu’araa: «akhuhum, akhuhum, akhuhum, akhuhum» y, de repente, la omisión de akhuhum. Precisión, y se podía ver por qué esa precisión se llevó a cabo. Este es el primer pequeño ejemplo.Veamos otro ejemplo. Ustedes conocen los nombres: Yathrib y Medina. ¿Son los nombres de la misma ciudad? Claro. El Corán habla de la ciudad de Medina con la palabra Medina muchas veces. Al menos cuatro citas se ponen en la pantalla para ustedes. Pero una utiliza Yathrib. Yathrib solo se utiliza en sura Al-Ahzaab, eso es todo. No hay otro lugar en el que se utiliza Yathrib en el Corán. Por cierto, ambos son nombres de Medina. Así se podría argumentar desde el punto de vista de abogado del diablo: «Hey, significan la misma cosa, ¿verdad? ¿Entonces por qué no cambiamos Yathrib por qué cosa? Medina. ¿O por qué no cambiamos Medina por Yathrib? Ustedes siguen hablando de que el Corán es perfecto, la elección de palabras es intrincada. Ustedes saben también que Yathrib y Medina son la misma cosa. Así que ¿por qué no poner uno en el lugar del otro? ¿Cuál es el problema? ¿Qué diferencia hay?»
Este es un estudio más de la historia. Antes de que el Profeta llegara, salAllahu ‘alayhi wa-s-salam, a Medina. ¿Cuál era su nombre? Yathrib. Después de que él llegó a la ciudad, fue declarado por unanimidad como el líder de esa ciudad y luego la ciudad fue acuñada como: «Madinatu-n-Nabi» – “la ciudad del Profeta”. «La Ciudad» – “Medina” ¿es la abreviatura de qué? De “La ciudad del Profeta”. Porque literalmente ¿Medina significa qué? “la ciudad”. El nombre real es Yathrib. O ustedes podrían pensar que es así. Antes de que el Profeta llegara era Yathrib, después de que llegó es Medina. Pero lo interesante es que en sura Al-Ahzaab, sura número 33, de hecho utiliza “Medina” y utiliza “Yathrib”, misma sura. Lo que es realmente interesante es que sura Al-Ahzaab es una sura Medinense. ¿Qué saben ustedes de las suras Medinenses? ¿Dónde estaba el Profeta, salAllahu ‘alayhi wa salam, en las suras Medinenses? Él estaba en Medina. Así que ya la ciudad debería haber sido llamada, ¿qué? Medina, pero vemos la palabra Yathrib. Ven el enigma aquí, ¿no? Ahora, aquí está la cuestión. Medina es la abreviatura de «Madinatu-n-Nabi» – la ciudad del Profeta, salAllahu ‘alayhi wa salam. Cuando Medina fue rodeada por fuerzas enemigas, algunas tribus judías se reunieron. Vinieron y convencieron a los Quraysh de volver y marchar después de la pérdida de Uhud. Recorrieron e hicieron alianzas con tribus más pequeñas y las convirtieron en un gran ejército que rodeó toda la ciudad de Medina. La ciudad de Medina fue rehén durante semanas. Esta situación de miedo incluso empeoró por la gente en el interior, había gente en el interior, que eran musulmanes, pero algunos de ellos eran sólo musulmanes por nombre y en realidad no tenían realmente fe en sus corazones. ¿Cómo es ese grupo llamado? Munafiquun, hipócritas, ¿verdad? Ahora, algunos de estos hipócritas, antes de que llegara el Profeta, salAllahu ‘alayhi wa salam, eran los líderes ¿de qué ciudad? Ellos fueron los líderes de Yathrib. Cuando llegó el Profeta tuvieron que renunciar a su posición. Tuvieron que renunciar a su liderazgo porque ahora ¿quién es el líder por defecto? Muhammad, salAllahu ‘alayhi wa salam. Cuando se vieron rodeados lo vieron como una oportunidad para reunir fuerzas y decir “mira dónde su liderazgo nos metió”. Entonces dicen – «qaaluu wa, ahla yaa Yathrib la muqaama lakum». Ellos dijeron: «¡Oh, pueblo de Yathrib ya no hay lugar para ustedes!”, «Faryighu» – «¡Vamos a volver!». ¿Volver a qué? “Volvamos a lo que era Yathrib de nuevo. Volvamos a las cosas como eran antes de que el Profeta, salAllahu ‘alayhi wa salam, tuviera liderazgo”. Mediante el uso de la palabra Yathrib ¿ya saben lo que exponen? Su verdadera lealtad. Porque si ellos reconocieran al Mensajero como su líder, salAllahu ‘alayhi wa salam, ¿qué palabra tendrían que haber usado? Medina. Así que sólo mediante el uso de esa palabra, Allah tomó esa palabra, la expuso que en el Corán y lo que aprendemos es que sus lealtades, sus aspiraciones fueron: «Oh, un día estará de regreso Yathrib. No va a ser ya Medina».
Esto se hace aún más evidente, más claro – cuando vamos a otros versos. Sura Al-Munafiquin, ¿la sura dedicada está a quiénes? Los hipócritas. Ahora, la sura que está dedicada a los hipócritas es interesante. Comienza con los hipócritas saliendo a mostrar lealtad al Mensajero, salAllahu ‘alayhi wa salam. «Idha jaaka-l-munafiquun qaalu nashhada innaka la rasullah» – cuando los hipócritas vienen a ti, cada vez que vienen, dicen: «Oh, damos testimonio, sin duda, que eres sin duda el Mensajero de Allah». Ahora, el musulmán no tiene que decir eso al Mensajero todas las veces, sino solo cuando se convierte – ¿correcto? Cuando él lo acepta entonces lo declara. De lo contrario, él sabe que él es el Mensajero de Allah. Pero si ustedes están tratando de compensar algo que sienten por dentro, como un niño que dice “yo no lo hice a propósito”. Y ustedes dicen lo que no hicieron, ¿verdad? Hay una conciencia culpable que habla. Es la mala conciencia que los hace hablar: «Realmente creemos que eres el Mensajero de Allah”. Y en esa sura para mostrar su lealtad exteriormente, dijeron: «La iirraja’na ila-l-Medina. La yukhrijannah a’azzu mina-l-azal». Dijeron “cuando volvamos a Medina”. Porque ellos estaban tratando de demostrar su lealtad. Cuando llegaron a tiempos desesperados en sura Al-Ahzaab la palabra equivocada salió de su boca y su verdadera lealtad estaba expuesta.
Otra comparación interesante: Meca y Bakkah. ¿Han oído hablar de estos dos nombres de la Meca antes? Ambos ocurren una vez en el Corán: una vez en el Corán, en Surat Muhammad. Allah, ‘Azza wa jal, utiliza la palabra “Meca”. En otra ocasión, Él usa la palabra “Bakkah”. Ahora, históricamente hablando son los dos son nombres de la misma ciudad, de la Meca. Algunos han argumentado que Bakkah fue el primer nombre y la Meca es el nombre más reciente. Con mayor precisión sin embargo, los lingüistas han argumentado que la Meca es el nombre y Bakkah es el apodo. Proviene de «Bakk», que es un verbo árabe. Esto significa que “se llena”. Significa tener una multitud y, congestión del tráfico – «al-izdiham» que en árabe moderno lo utilizamos, ok. Ahora, cuando se utiliza Bakkah en sura Ali-‘Imran con el originario «Ba» de la palabra multitud, las pocas aleyas que siguen son aleyas del hajj – “wa liLlahi ‘ala-n-nasi hijju-l-bayt”. ¿Qué viene con el Hayy? Una multitud. ¿Cuál es la mejor palabra en ese contexto? Bakkah. Pero no hay mención de Hajj en sura Muhammad, vuelven a la normalidad ¿y qué palabra se utiliza? Makkah. Subhan Allah.
Incluso en este pequeño detalle ustedes y yo diríamos que los nombres Meca y Bakkah, son lo mismo, son intercambiables. Pero el nivel de precisión en las palabras del Corán no tiene paralelo. Los seres humanos no pueden pensar a ese nivel cuando hablan. No pueden pensar en ese nivel. No estamos en ese nivel de precisión. Así que una cosa que aprendimos del Corán es lo cuidadosos que debemos ser con nuestra lengua, ¿no? Esta es la sunna de Allah, ‘Azza wa jal. Hablar muy muy muy preciso, incluso para el más mínimo detalle.
Otra comparación interesante, volvemos a sura Al-Ahzaab. Esto es posible que hayan oído antes. “Maa ja’alaLlahu li rajulin min qalbayni fee jaufihi”. En la cuarta aleya Allah dice: «Allah no puso dos corazones en el interior de ningún hombre, en absoluto». Pero ahora escuchen con atención. «Wa maa ja’alu azwajukum». ¿Ustedes saben lo que significa «azwaaj»? Cónyuges. Y Allah está hablando a los hombres desde el principio de la aleya. Por lo tanto, significa esposas. Debido a que el inicio de la aleya está hablando con los hombres, cónyuges aquí significa esposas. Las esposas son mujeres. «Wa maa Ja’ala azwajukum allatee tuTHhiruuna minhunna ummahatikum». ¿Saben lo que «ummahaat» significa? Madres. Mujeres, ¿no?
El resto de la aleya se ocupa de las mujeres. Pero en el principio Allah dice: «Allah no puso dos corazones en el interior de ningún hombre – maa ja’alaLlahu li rajulin». La aleya habla de los hombres y las mujeres en ella. Así que me imagino que podríamos decir: Allah no puso dos corazones en el interior de un ser humano. Porque si dices “ser humano” ¿que incluye? Hombres y mujeres – ambos. Pero si ustedes dicen “hombres”, sólo incluye a los hombres. Esto es así porque el Corán es literalmente exacto y preciso en sentido figurado. Por supuesto, cuando Allah dice “Allah no puso dos corazones en el interior de ningún hombre” no está siendo literal. La idea es que no pueden haber dos intenciones al mismo tiempo: fe e incredulidad, al mismo tiempo, fe e hipocresía no pueden coexistir – es uno o el otro, creer o no creer – la certeza y la duda no pueden coexistir – una o la otra. Así que la expresión es figurativa: “Allah no puso dos corazones en el interior de ningún hombre”. Pero si se toma literalmente, – ¿es verdad literalmente, también? Si. Excepto para las mujeres que pueden quedar embarazadas. Y cuando se quedan embarazadas ¿cuántos corazones pueden estar dentro de ellas? Subhan Allah! Podrías haber argumentado literalmente: «Hey, hey, ¿qué pasa con las mujeres? Puede ser que tengan dos corazones en algún momento. «Incluso la crítica desde el punto de vista literal, no es siquiera posible. “Maa ja’alaLlahu li rajulin min qalbayni fee jaufihi” – subhan Allah!
Ok, otra. No puse árabe en la pantalla a propósito porque yo no quiero que piensen que se puede apreciar el tema sólo por el lenguaje árabe. Quiero explicarlo en Inglés in sha’ Allahu Ta’ala tanto como sea posible.
Allah habla de tranquilidad a menudo. La palabra árabe para “tranquilidad” es “as-sakeenah”. Allah, ‘Azza wa jal, dice “huwa lladhee anzala sakeenata fee quluubi-l-mu’mineen”- Él es el que puso tranquilidad dentro de los corazones de los creyentes, la mandó a los corazones de los creyentes. Pero entonces varias veces en sura Al-Fath y sura Al-Tawba también: “fa andhala sakeenatahu ‘ala rasuulihi wa ‘ala-l-mu’mineen, fa ‘aleema ma fee quluubihim fa andhala sakeenata ‘alayhim” – Envió tranquilidad sobre ellos. En un lugar, dice en la misma sura: Envió tranquilidad dentro de sus corazones; en otro dice: envió la tranquilidad sobre ellos. Ahora, tranquilidad dentro de sus corazones, tranquilidad sobre ustedes – es la misma idea en esencia, pero no lo suficientemente cercano – esto sería socavar la precisión del Corán. Ustedes ven, acerca el corazón, básicamente, en el Corán Allah habla de dos sentimientos negativos. Hay muchos, pero particularmente hay dos sentimientos negativos centrales en los corazones. «La khaufun ‘alayhim wa la hum yahzanuun» – hay temor y hay dolor en el corazón. Todos provienen de uno de los dos, provienen del miedo o de la pena. Estos son los dos sentimientos negativos principales: la ira puede ser el resultado del dolor y empeorar, y el miedo lleva a muchas otras enfermedades como la hipocresía. La fuente puede ser el miedo. Así que ahora estos dos sentimientos se encuentran en la literatura árabe y la poesía, incluso antes del Islam, la ira se describe como algo que se libera dentro de tu corazón. Y es algo que no desaparece – se mantiene. Al igual que si ustedes están enojados con sus amigos por algo que les han dicho, no están solo enojados con ellos en ese momento – están enojados con ellos cada vez que vean sus caras. Está en su corazón. No se limita a ese momento. Se instaló. Así que tienen que desinstalarlo, lo que significa que ¿tienes que ir a dónde? En el interior del corazón. En el comienzo de sura Al-Fath – los musulmanes habían viajado por todo el camino desde Medina a ir a hacer el hajj. ¿Consiguieron hacer hajj en Hudaybiyah? No. Así que ¿qué es lo que hay en sus corazones? Ira, frustración. Si ustedes estudian la vida del Profeta, ustedes encontrarán una gran cantidad de frustración e incluso en las lenguas de los creyentes, ¿no? Entonces, ¿dónde necesitaban la tranquilidad? Dentro de los corazones. Pero el miedo, e incluso en la imaginería árabe encontramos esto en «shi’r», – el miedo es algo que se siente en la piel. El miedo es algo que se siente en todo el cuerpo – estremece. El miedo es algo que abruma. Viene y cubre tu corazón. En vez de entrar en tu corazón está por encima de tu corazón. Y no se detiene cuando está dentro de tu corazón. No sale hasta que lo hayas sacado por ti mismo. Pero cuando esta sobre tu corazón, tan pronto como la situación de miedo termina, ¿qué sucede? Vuelven a la normalidad. Sus hijos están jugando. Oyen de repente un trueno – los niños se asustan. Los truenos se terminan – consiguen salir a jugar de nuevo, ¿verdad? Así es como somos. Se oye algo que da miedo, tan pronto como la situación pasa vuelven a la normalidad. El temor no vuelve necesariamente. Pero con la ira no tienen que… Alguien no tiene que molestarles de nuevo para que ustedes se enojen nuevamente, es la vieja ira que vuelve por ninguna otra razón, ¿entienden? Así que ahora, ya que la ira o el miedo les vencen, ¿qué tiene que superarlos a ustedes para contrarrestarlo? La tranquilidad. Entonces Allah en estas situaciones, siempre que Sakeenah se menciona con “’ala”, es: “tranquilidad enviada sobre”…, como cuando el Mensajero, salAllahu’ alayhi wa salam, estaba en la cueva con Abu Bakr As-Syddyq, radyAllahu anhu’, y los investigadores estaban buscándoles tratando de encontrarlos y matarlos, ¿esta era una situación de enojo o miedo? Esta era una situación de miedo. Entonces Allah envió tranquilidad sobre ellos – “’alayhim”. Cuando los kuffar al final de surat Al-Fath, ya saben, se habían juntado. «Hameeyata-l-jahiliyah» – Ellos se unieron a esta mentalidad de pandilla – para conspirar contra los musulmanes e ir a luchar contra ellos. Esto era una situación intimidante porque los musulmanes estaban apenas armados. Allah envió tranquilidad sobre ellos. Cuando Allah, ‘Azza wa jal, prometió que van a entrar en la ciudad de La Meca en paz – “la tadkhuluuna-l-masjida-l-Haraam in shaa` Allahu amineen” – entrarán en ella pacíficamente. Y a propósito de «la takhafuun» – ustedes no van a tener miedo de nada, niega el miedo. Y en esa situación envió tranquilidad sobre ellos. Así que hay tranquilidad en el interior y hay tranquilidad en el exterior. Si ustedes acaban de leer es casual que digan: «Hey, que es la misma cosa.» Pero si ustedes aprecian la profunda exactitud de las palabras “en” y “sobre” van a ver la diferencia.
Este es uno de mis favoritos – el siguiente. «Dhaalika-l-Kitabu», ¿cómo va la aleya? «La rayba fihi», mucha gente conoce esa aleya, ¿verdad? Ahora, ¿qué significa «dhalika? ¿Alguien sabe? “Eso”. ‘Dhalika-l-kitaab’ – ese libro. Ahora, cuando digo «esto» en lugar de decir «eso», ¿qué está más cerca? ¿“Este es un libro” suena como que está más cercano, o “ese libro” suena como que está más cercano? “Este libro” está más cerca. “Ese libro” está lejos, porque «eso» es la palabra nominadora «dhalika» que se refiere a la distancia. Pero cuando algo está más cerca, ustedes no dicen «eso», dicen «esto». Lo que es interesante en el Corán es que encontramos “ese libro”, pero la mayor parte, en múltiples, múltiples instancias no dice “el Corán” sino “este Corán” – «haadha-l-Qur’an» – este Corán. Así que cuando Dios usa «libro», por supuesto, Él está hablando del Corán, ¿no? Pero Él lo pone lejos. Cuando Él habla del Corán, ¿qué hace? Cerca, por ahora vemos la comparación de los dos primeros – “ese libro” frente a “este Corán”. Ustedes saben, la palabra «libro» en árabe es «Kitab», cuyo origen es «kataba – yaktubu» – escritura. Proviene de «escritura». El significado real de kitaab es lo que se documenta, lo que está grabado o escrito.